Monday, October 03, 2005

La revolución no será bloggeada

Señores, el día ha llegado.
Después se ha ido, y otro día ha llegado en su lugar. Pero ese también se fue, entonces empezamos a preguntarnos: "Si todos los días tienen esa mala costumbre de ir y venir, ¿por qué seguimos esperando que llegue UN día en particular?".
Después de preguntarnos eso, comenzó un programa de televisión, y entonces nos convertimos nuevamente en flanes frente a la pantalla. Pero la semilla estaba plantada, y de ella crecería un hermoso repollo de donde nacería el principio de un comienzo de un intento de duda. No parece mucho, pero es suficiente.
Si la regamos con cariño, con cinismo y con poca fe en la humanidad, esa pequeña duda va a crecer, y se convertirá en un fuerte e inamovible paradigma.
Deben tener cuidado: su duda puede desviarse y terminar por convertirlos en paranoicos. Los maniáticos de las conspiraciones no somos paranoicos. Ellos tienen una enfermedad, nosotros también. Ellos ven cosas donde no están, nosotros vemos la verdad. Ellos temen a lo que creen ver, nosotros estamos preparados para hacerle frente.
Nada puede detenernos, excepto ELLOS.
No confíen en nadie. Duden de todos.
Revolución.